LA LOBERA DE MARTÍN
Uno de los miedos que teníamos de Zaragoza era el tema de la patata, ya que a varios propietarios que preguntamos, nos dijeron que había mucha patata congelada por allí, que era una pena, la verdad, al menos las de La Lobera de Martín estaban muy buenas, bien hechas, crujientes, y cortadas a trozos medianos, se notaba patata de calidad.
Una salsa solo, digamos que es algo así como un cosa intermedia entre la mediterránea y la madrileña, o tal vez una mayonesa mezcalina con salsa de tomate, o ketchup fino, con un toque de ácido, pero bien, quizá faltaría añadir un poco más de salsa, porque el plato viene cargadito de patatas, y la patata siempre tiene que tener salsa donde mojar, es una de las reglas de oro braveras, está buena la salsa.
5 euros, mmm…. no está mal del todo, ya que además del pedazo de plato que te sirven, que comen al menos 2 o 3, la calidad es buena, pero podían ser algo más baratas, sobre todo porque la media de la zona es más baja, la verdad.
Se encuentra en un centro comercial, no muy grande pero bonito, en el exterior Plaza de España, abierta, con luz, de las que gusta quedarte un rato mirando como cae el agua de la fuente, eso fue precisamente lo que hicimos😜 .
VALORACIÓN
Comer en el subsuelo con las paredes de muralla, rollo caballerías antiguas, es una gozada, su exterior también, toda su comida excelente, sus patatas bravas no están mal, solo por ver el restaurante por debajo ya vale la pena entrar y comer lo que sea, el menú del día es de calidad, aquí podéis ver el TOP10 de Zaragoza.